Radio Sutatenza no solo se transformó en un medio importante para la formación del campesinado en materias como el alfabeto, los números, la salud o la agricultura, entre otras, sino que llevó a cabo una formación que invitaba al hombre, a la mujer, a los niños y en general al campesinado, a trabajar tanto colectiva como individualmente por su propio desarrollo y a tomar las decisiones pertinentes para la vida diaria. Radio Sutatenza instruyó al campesinado para que pudiera superar la marginalidad y la pasividad, convirtiéndolo en sujeto social activo en su comunidad.
Acción Cultural Popular se creó en momentos en que el comunismo estaba en auge y que para muchos se convirtió en una amenaza que podía llegar a América Latina. Por tal motivo, la Iglesia venía trabajando para evitar que el comunismo se instaurara en el continente y llenara espacios que tradicionalmente la Iglesia Católica había ocupado y reivindicado como suyos, especialmente aquellos relacionados con el tema social, con la situación de la clase obrera y con las condiciones de vida del campesinado, entre otros. La Iglesia, desde finales del siglo XIX, ya venía trabajando en el tema y mediante la encíclica Rerum Novarum y la Acción Católica, empezó a desarrollar obras que beneficiaran a las comunidades más desprotegidas. En Colombia, Crisanto Luque, director de la Diócesis de Tunja, realizó trabajos en ese sentido y apoyó constantemente la labor de José Joaquín Salcedo en el municipio de Sutatenza.